miércoles, 16 de mayo de 2012

Sale, porque sale!


Dice mi marido que siempre les escribo de cosas bonitas y que van a pensar que mi vida es de color rosita… no se porqué el me quiere recordar que si pasamos por dinámicas normales en nuestra casa. Conflictos, contrariedades, cansancio, desorganización, etc.  Me da risa que me dice – por qué no escribes de eso? Ay, pues, porque prefiero no pensar en todo eso… pero en estos días no lo he podido evitar.
 
Tengo una semana tratando de terminar de lavar toda la ropa sucia que se acumuló en mi cuarto de lavado… lavo y lavo, doblo y doblo y nada que se acaba y a parte no he comenzado ni a guardar! Me doy cuenta que soy bastante desorganizada. En 24 horas quiero meter lo que no se puede terminar ni en 36. 

En este momento de mi vida traigo tantos sombreros puestos que hoy me tuve que sentar a analizarme a mi misma. Todo me parece importante, todo lo que hago es necesario – pero mi pregunta tuvo que llegar a ser…  ¿Dios, tú que necesitas que haga, cuál es tú prioridad, cómo acomodo mi agenda a la tuya?

La respuesta me pareció extraordinaria – “Mi agenda es la agenda del reino y es eterna, la tuya es chiquita y limitada.”

Me contestó con el Salmo 37 –

“Apaciéntate de la verdad – o sea aliméntate de la verdad – Su Palabra
Deléitate en Mí – haz de pasar tiempo conmigo lo más padre de tu día y hazlo de una manera que te llene y te conecte conmigo.”

“El resultado será que mis deseos serán injertados en tu corazón y se convertirán en tus deseos. Tus prioridades, objetivos, metas y vida estarán unidos a los míos. Puedes confiar en que YO voy a hacer lo hay que hacer, acabar lo que hay que acabar, comenzar lo que hay que comenzar, y acomodar lo que hay que acomodar. Mi promesa para ti es que te recrearás en abundancia de paz.”

Me encantó! Pude decidir cambiar la ropa de la lavadora a la secadora, echar otra lavadora y mientras esperaba, sentarme a doblar y doblar mientras escuchaba mi clase de la maestría en una computadora que tenía cerca.  Todo eso recreándome en su completa paz!



Todavía no acabo de la ropa, pero vale, no pasa nada… Ariel necesita ayuda con su proyecto y la ropa puede esperar… Escojo apacentarme de la verdad y deleitarme en El… todo lo demás – se lo encargo a El y las cosas salen, porque salen!


2 comentarios:

  1. QUE HERMOSO COMPRENDER QUE TODO LO PODEMOS HACER EN PAZ,ME UNO A DELEITARME EN EL ES LO MEJOR GRACIAS RITA .

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  2. Esa eres Tú! Pero a veces se te olvida!

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