La oración del corazón 1

Efesios 1:15-23 

Por esta razón, yo también, habiendo oído de la fe que tienen en el Señor Jesús y de su amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por ustedes recordándoles en mis oraciones. Pido que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, les dé espíritu de sabiduría y de revelación en el pleno conocimiento de él; habiendo sido iluminados los ojos de su entendimiento para que conozcan cuál es la esperanza a la que los ha llamado, cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, y cuál la inmensurable grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, conforme a la operación del dominio de su fuerza. Dios la ejerció en Cristo cuando lo resucitó de entre los muertos y lo hizo sentar a su diestra en los lugares celestiales, por encima de todo principado, autoridad, poder, señorío y todo nombre que sea nombrado, no solo en esta edad sino también en la venidera. Aun todas las cosas las sometió Dios bajo sus pies y lo puso a él por cabeza sobre todas las cosas para la iglesia, a cual es su cuerpo, la plenitud de aquel que todo lo llena en todo. 

¡Que padre esta oración! ¡Me emociona!!! Pablo diciéndole a los Efesios: "Puedo reconocer tu fe, oigo de ella, la puedo ver, y ahora pido mucho más para ti." 

Creo que entonces me conviene cada día tener más fe; eso es con lo que quiero comenzar. 

Hebreos 10: 35-36 - No desechen, pues, su fe confiada en Jesús, la cual tiene una gran recompensa. Porque lo que necesitan ahora es una paciente perseverancia para que, continúen haciendo la voluntad de Dios, y obtengan lo prometido.

Oremos pues así - 

Jesús se que la fe es un regalo que viene de ti. Hoy te pido que multipliques en mí el don de la fe. Que los días en que siento que se me va, pueda vivir confiada que eres tú en mí el que actúa en fe. Cuando los obstáculos sean muchos y la decepciones continuas, que yo pueda vivir confiada en ti en paciente perseverancia, sabiendo que el galardón que tu tienes planeado para mí es mucho mayor que cualquier cosa que en este mundo pueda enfrentar. Que cada día dependa yo más de tu fe actuando en mí; que sea una fe que otros puedan ver a través del amor que fluye a de mí. AMEN